Riesgo preconcepcional y métodos anticonceptivos de control. Revisión bibliográfica.
Gómez Jiménez CA, Hernández Díaz M, Jiménez Cardoso J
La vitamina C prolonga la vida. El consumo elevado de frutas y verduras ricas en vitamina C se asocia a un riesgo reducido de mortalidad por cualquier causa .Incluso pequeñas cantidades de vitamina C en plasma se asocian a una reducción del riesgo de enfermedad y mortalidad cardiovascular en adultos sanos. Un extra de fruta con vitamina C implica un 20% menos probabilidades de muerte independientemente de la edad del individuo, de su presión arterial, colesterol, consumo de tabaco, diabetes y uso de suplementos dietéticos.El riesgo de muerte se reduce en un 50% entre aquellos individuos con elevados niveles plasmáticos de vitamina C respecto a los que presentan las concentraciones más bajas. Se reconocen que esa mayor esperanza de vida no es atribuible únicamente a las propiedades antioxidantes de la vitamina C. Lo normal es que una persona que consume fruta y verdura abundantes se caracterice por otros hábitos saludables que contribuyen a su mejor estado de salud, entre ellos practicar ejercicio y no fumar.
Riesgo: Riesgo es la vulnerabilidad de "bienes jurídicos protegidos" ante un posible o potencial perjuicio o daño. Fuente: Disponible en: http://bvs.sld.cu/revistas/gme/pub/vol.9.(1)_18/resumen.html
Destacan factores que aumentan el riesgo de hemorragia en el parto
La mayor edad materna, la cesárea de emergencia o programada y ser del sudeste asiático -entre otros factores- aumentan el riesgo en las mujeres de padecer hemorragia grave durante o después del parto. La hemorragia grave es la principal causa de muerte materna durante el parto en el mundo, indicaron investigadores.
Las hemorragias obstétricas son habituales en los países pobres y varía su frecuencia en los desarrollados. Los expertos analizaron datos sobre más de 307 000 partos durante cinco años en Noruega. El equipo dirigido por Iqbal Al-Zirqi, de la Universidad de Oslo, publicó los resultados en la An International Journal of Obstetrics and Gynaecology.
Se identificó como hemorragia grave, la pérdida de sangre superior a 1,5 litros o la necesidad de una transfusión de sangre en 3501 partos (1,1%). La cesárea de emergencia fue el procedimiento más riesgoso, seguido de los trastornos que producen coágulos, la cesárea programada y los embarazos múltiples.
La edad maternal se consideró un factor de riesgo. Las madres mayores de 40 años eran significativamente más propensas a tener una hemorragia grave que las de 25 a 29 años de edad. Las mujeres del sudeste asiático eran un 77% más propensas que las europeas a sufrir esta afección. Las nacidas en el oriente medio la tasa era de un 40% menor que en las europeas.
Durante el período estudiado, la tasa de mortalidad materna fue de 20 mujeres por cada 10 000 partos en las que sufrieron hemorragia grave, comparada con 0,4 por cada 10 000 en las madres sin hemorragia. Según los datos que ofrecer el estudio se debería generar una revisión de los procedimientos de manejo obstétrico.
Fuente: Nueva York, octubre 4/2008 (Reuters Health) Disponible en: http://www.sld.cu/servicios/aldia/view.php?idn=23116